El Grito, 15 de septiembre, Día de la Independencia de México
El Grito de Dolores (más conocido como El Grito, el Grito de Independencia) que se celebra cada año en la noche entre el 15 y el 16 de septiembre es una fiesta mexicana por excelencia, es la noche en que todos los ciudadanos de México celebran su independencia de los conquistadores españoles.
Desde la llegada de Hernán Cortés en 1521 y la conquista de la zona, lo que hoy es México se llamó Nueva España.
Influenciados por los conceptos establecidos por filósofos franceses como Rousseau, Voltaire y Montesquieu y la Guerra de Independencia de los Estados Unidos, los criollos (descendientes de españoles nacidos en América) que eran tratados como sujetos de segunda, decidieron iniciar un levantamiento.
A las 5:00 am del 16 de septiembre de 1810, el Cura Miguel Hidalgo, acompañado de varios otros cómplices, Ignacio Allende, Doña Josefina Ortiz de Domínguez, tocaron las campanas de su pequeña iglesia en el pueblo ahora llamado Dolores Hidalgo, llamando a todos a luchar por la libertad, lo que se conoce como “El Grito de Dolores” (el anuncio, o grito, de Dolores). Uno de los momentos cruciales en la historia de México.
Se celebra todos los años en las plazas (plaza o zócalo) de las principales ciudades del país. Con dos días de fiesta tradicional mexicana y con fuegos artificiales, desfiles, juegos, discursos, todo tipo de comida mexicana y mucha diversión para locales y visitantes.
Septiembre es el mes de México y las calles de todo el país se adornan con banderas de papel (o plástico) y guirnaldas de colores, lo que localmente se conoce como “papel picado”. En cada esquina, hay vendedores con una llamativa variedad de banderas, globos, sombreros y molinetes, en blanco, rojo y verde, los colores nacionales. Hay banderas en las casas y en todos los edificios gubernamentales y plazas de los pueblos.
Todo comienza la tarde del 15 de septiembre, cuando los mexicanos empiezan a congregarse en la plaza y calles aledañas, sin dejar casi espacio para moverse, para poder presenciar y participar del grito. El alcalde del pueblo, quien sea en ese momento, repite, como un mantra, las mismas palabras que proclamó el cura Miguel Hidalgo y Costilla hace más de 200 años.
El último “VIVA” es coreado con gran patriotismo por todos los presentes. se toca la campana y se ondea la bandera. ¡Entonces todos cantan solemnemente el himno nacional y luego comienza la fiesta!
Los cielos se iluminan con multitud de fuegos artificiales que alegran a todos los presentes y los llenan de orgullo, sabiendo que ahora viven en un país libre e independiente.